La
cavitación y la
radiofrecuencia se presentan como una combinación ideal para tratar, la primera, la grasa localizada y la segunda como tratamiento reafirmante una vez se ha eliminado la grasa y ha producido flacidez.
¿Qué es la cavitación?
La
cavitación es un procedimiento no quirúrgico que consiste en la aplicación de
ultrasonidos de baja frecuencia sobre la zona que se quiera tratar. El ultrasonido provoca que las células adiposas se disuelvan y el paciente puede eliminarlas de manera natural mediante la orina o el sudor.
¿Cuántas sesiones son necesarias?
Para obtener resultados satisfactorios suelen ser necesarias al menos 10 sesiones, de unos 40 minutos aproximadamente, con un intervalo de tres días entre ellas.
¿Es necesario seguir algún protocolo tras el tratamiento?
Para facilitar la eliminación de las células grasas y evitar que se reabsorban, conviene recurrir a alguna técnica de drenaje, principalmente masajes o presoterapia.
Asimismo, con el fin de eliminar grasa y toxinas, antes y después de cada sesión, se debe beber al menos 1,5 litros de agua.
También es recomendable seguir una
dieta baja en calorías desde días
antes de iniciar el tratamiento de cavitación.
¿En qué consiste la radiofrecuencia?
La radiofrecuencia es un tratamiento facial y corporal estético muy eficaz, seguro y con efectos duraderos que sirve para corregir la flacidez.
Este tratamiento, no invasivo, consiste en la aplicación de
ondas electromagnéticas de alta frecuencia sobre zonas concretas del cuerpo. Estas ondas provocan el calentamiento de las diferentes capas y promueven la formación de nuevo colágeno así como consiguen un ligero efecto de drenaje linfático.
En la clínica Flores de Apodaca apostamos por la
combinación de ambos tratamientos para obtener unos resultados satisfactorios y duraderos relacionados con la reducción de la celulitis y de la grasa corporal. Infórmate sobre los diferentes packs y deja que te asesoremos sobre el que te resulte más conveniente.